1–3 de diciembre: Desintoxicación y Purificación
Días ideales para eliminar toxinas del cuerpo. Sigue una dieta ligera, bebe abundante agua y evita hábitos nocivos. Complementa la desintoxicación con infusiones herbales y suplementos naturales.
4–6 de diciembre: Ejercicio y Actividad Física
Excelente momento para entrenamientos intensivos o comenzar un nuevo plan de fitness. La energía lunar durante esta fase potenciará tu resistencia y facilitará el logro de tus objetivos físicos.
7–9 de diciembre: Cuidado de la Piel y el Cabello
Días propicios para tratamientos de belleza y autocuidado. Dedica atención extra a tu piel y cabello o prueba un nuevo estilo. Estas actividades mejorarán tu bienestar general.
10–12 de diciembre: Reducción del Estrés y Relajación
Perfecto para practicar yoga, meditación y recibir masajes relajantes. Aprovecha estos días para recuperar la calma interior y fortalecer el equilibrio mental. Experimenta técnicas de relajación para reducir el estrés.
13–15 de diciembre: Refuerzo del Sistema Inmunológico
Concéntrate en una alimentación rica en vitamina C, D y zinc para fortalecer las defensas naturales del cuerpo. Estos días son ideales para mejorar tu inmunidad.
16–18 de diciembre: Consultas Médicas
Planifica chequeos preventivos y visitas al médico. Es un buen momento para evaluar tu salud general y prevenir posibles problemas.
19–21 de diciembre: Bienestar Mental
Dedica tiempo a actividades creativas como la lectura o la escritura para mejorar tu equilibrio emocional. Presta especial atención a tu salud mental.
22–24 de diciembre: Salud de Articulaciones y Músculos
Realiza ejercicios suaves como estiramientos o natación para cuidar tus articulaciones y músculos. Estos días son ideales para mejorar la flexibilidad y aliviar tensiones.
25–27 de diciembre: Ajustes en la Alimentación
Revisa tus hábitos alimenticios y experimenta con recetas saludables. Una dieta equilibrada rica en vegetales mejorará tu salud y bienestar.
28–30 de diciembre: Balance Interior y Crecimiento Espiritual
Perfectos para prácticas espirituales como meditación, yoga o ejercicios de respiración. Mantén la armonía interna y fomenta tu desarrollo espiritual.